Ayer fui otra vez a aquel colegio del que os hablé. Estuve viendo cómo se hacían las clases, cómo interactuaban los/as niños/as, cómo utilizaban las nuevas tecnologías, etc. Me volví a quedar impresionada, los/as niños/as son más inteligentes y capaces de lo que yo me esperaba para su edad. Resuelven problemas y se esfuerzan en todo lo que hacen, le ponen ilusión y ganas a cada actividad... Los vi haciendo matemáticas y leyendo. Es más, los vi practicando la escritura, en concreto la letra "p". Tenían que escribir palabras con "p", además de las típicas: pepe, pipo, pupa, papá...se pusieron a buscar en los títulos de los cuentos palabras con "p" y copiarlas en la ficha.
También vi cómo utilizaban la pizarra digital. Para empezar todos/as estaban entusiasmados/as y encantados/as de estar en la biblioteca para utilizar la pizarra. Todos/as querían salir a usarla, todos/as querían partcipar y los/as que no salían ayudaban al/a la que estaba en la pizarra haciendo el ejercicio. Me parece un buen método para enseñar porque a los/as niños/as les encanta y así prestan más atención, pero no me parece algo perfecto. Para empezar, los/as niños/as al ponerse delante hacen sombra y no pueden ver con lo que están trabajando. Otro problema es que a veces a los/as niños/as les cuesta arrastrar las imágenes y demás, aunque esto es poco habitual, los/as niños/as lo entienden todo muy rápido.
En definitiva, fue una gran experiencia, me gustará dedicarme a lo que estoy estudiando. También me he dado cuenta de otra cosa, no es bueno poner a muchos/as niños/as en la misma clase, en grupos reducidos se trabaja mejor y aprenden mejor.
Sara
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